La arquitectura pasiva es un modelo de diseño y construcción de edificios que busca maximizar el uso de la luz natural y el calor del sol para reducir el consumo de energía. Esto se logra mediante el uso de diversas técnicas y la incorporación de elementos sostenibles. Un claro ejemplo de ellos son las casas pasivas de madera.
La orientación adecuada del edificio, la ventilación cruzada, el uso de techos y paredes aislantes o la incorporación de paneles solares y sistemas de recuperación de calor son algunos de estas técnicas y elementos sostenibles. El objetivo, como acabamos de decir, es tratar de reducir los costes en energía y disminuir la huella de carbono en el medio ambiente.
¿Qué es una casa pasiva de madera?
Una casa pasiva de madera es un tipo de construcción que se caracteriza por su alta eficiencia energética y el uso de materiales naturales como la madera. Estas casas emplean una serie de estrategias de diseño y construcción específicas con el objetivo de reducir al mínimo el consumo de energía y maximizar el confort térmico.
La madera es un material sostenible y renovable, lo que convierte a estas viviendas en una opción muy atractiva para quienes están interesados en reducir su huella de carbono. Estaríamos hablando, por tanto, de una construcción totalmente eficiente, cómoda y sostenible que garantiza el máximo confort en el hogar.
¿Cuáles son los beneficios de las casas pasivas de madera?
Como acabamos de ver, las casas pasivas de madera maximizan el aprovechamiento de la energía natural y minimizan la necesidad en el uso de sistemas de calefacción y enfriamiento mecánicos. De ahí su alta eficiencia energética, al tratarse la madera de un material aislante natural que ayuda a mantener la temperatura interior de la casa mucho más estable.
Al mismo tiempo, las viviendas pasivas de madera están diseñadas para aprovechar al máximo la luz natural y la ventilación cruzada con el fin de reducir la necesidad de iluminación artificial y los sistemas de ventilación mecánicos.
Por otro lado, hay que hablar del mínimo impacto ambiental de las casas pasivas de madera al ser esta un material renovable y sostenible. Una casa de este tipo requiere de menos energía para su funcionamiento y es muy cómoda y muy saludable para sus habitantes.
¿Ofrecen un buen aislamiento térmico?
Las casas pasivas de madera ofrecen un excelente aislamiento térmico. Solo hay que pensar que la madera es un material natural que posee una alta capacidad para retener el calor. Esto hará que la vivienda se mantenga más cálida en invierno y más fresca en verano. Además, la estructura de la madera es porosa, lo que permite que el aire y la humedad circulen libremente y así mantener más estable la temperatura en el interior.
El aislamiento térmico de las casas pasivas fabricadas en madera se consigue, por lo general, con el uso de paneles de madera contrachapada, paneles de fibra de madera y lana de roca. Estos materiales son altamente eficientes a la hora de retener el calor y proporcionan un aislamiento térmico mucho más elevado.
Método Crea, expertos en la construcción de casas pasivas
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