La neuroarquitectura aplicada
al Proyecto NICA
Uno de los pilares de Casa NICA es la aplicación de los principios de la neuroarquitectura desde la fase inicial del proyecto. Así, hemos estudiado cómo los espacios afectan a nuestras emociones, nuestro comportamiento y nuestro bienestar para tenerlo en cuenta a la hora de diseñar la vivienda.
Para entender el proyecto es preciso explicar ciertos conceptos en los que se basa la neuroarquitectura. No pretendemos aquí hacer un monográfico extenso sobre esta disciplina, pues existen otras fuentes a las que acudir para obtener una idea mucho más completa y detallada. Para profundizar más recomendamos acudir al libro “Neuroarquitectura. Aprendiendo a través del espacio” (2022) de Ana Mombiedro que explica de un modo detallado pero muy asequible este asunto. Lo que trataremos en este artículo es explicar cómo hemos aplicado estos principios a nuestro proyecto: la Casa NICA.
La neuroarquitectura se basa en la idea de que el cerebro humano está diseñado para interactuar con el entorno físico. Los estímulos visuales, auditivos y táctiles que recibimos al estar en un espacio determinado provocan reacciones en nuestro cerebro, desencadenando emociones y respuestas fisiológicas. Todos nos hemos sentido más relajados en espacios amplios, con luz natural y conexión con el exterior. Estos espacios favorecen la creatividad y la productividad. Sin embargo espacios con ángulos muy marcados y oscuros nos pueden provocar estrés y ansiedad.
El objetivo principal de la neuroarquitectura es crear espacios que promuevan el bienestar y mejoren nuestra calidad de vida. Al comprender cómo el entorno físico afecta a nuestro cerebro, se pueden diseñar los espacios dependiendo del uso que vayamos a darles. Es muy interesante utilizar estos principios en espacios públicos, destinados al trabajo, al aprendizaje, a la salud… pero ¿por qué no aplicarlos al espacio en el que habitamos y descansamos? Hacía esta idea nos movemos en Método Crea y cada vez más profesionales del sector.
Los sentidos se convierten en esenciales para captar la información de los espacios que va directamente al cerebro, donde se produce una respuesta. Esta respuesta puede ser muy variada en función del estímulo, y entender este juego de estímulo-respuesta es la clave para orientarlas a nuestro favor.
Desde el inicio del proyecto buscábamos construir una casa eficiente y saludable para Dominica. De modo que enfocarnos en cumplir los fundamentos de la neuroarquitectura es clave para conseguir nuestro objetivo.

Salk Institute, San Diego (Louis Khan).
Primer edificio diseñado teniendo en cuenta el funcionamiento del cerebro.
Los principios de la neuroarquitectura
- La iluminación. Es el principal estímulo ambiental que interviene en la regulación del ritmo circadiano (reloj biológico) y especialmente en la producción de melatonina (hormona del sueño) y cortisol (hormona de la actividad). Siempre es preferible dotar los espacios de la entrada de luz natural para no alterar negativamente el ciclo y tener muy en cuenta la temperatura lumínica en función del estímulo que se quiera conseguir (tonos cálidos para favorecer la relajación y blancos para favorecer la atención.
- Los colores son capaces de influir en el estado de ánimo y en nuestra forma de sentirnos dentro de un espacio. Conocer lo que cada uno provoca en nosotros es interesante para elegir el interiorismo de la vivienda.
- Contemplar un espacio natural crea emociones positivas que nos ayudan a estar en un estado de calma y favorecen nuestro descanso. Además, si incorporamos vegetación en los proyectos, nos aseguramos ambientes más saludables. Las plantas son unas grandes aliadas a la hora de regular la humedad, eliminar las partículas tóxicas del aire y reducir la radiación solar.
- La morfología es importante para diseñar espacios que tengan en cuenta las emociones que nos producen las formas y dimensiones de los mismos. Será más adecuado diseñar estancias más diáfanas con techos altos que contribuyen a un pensamiento mas creativo y colectivo, que estancias más angostas que favorecen un pensamiento más individual.
- Los materiales nos ofrecen muchas sensaciones diferentes dependiendo de su textura, color o temperatura.
- Cuando hablamos de confort higrotérmico hablamos de las condiciones de temperatura, humedad y ventilación de la vivienda. Unas condiciones inadecuadas pueden provocar patologías y trastornos de salud que la Organización Mundial de la Salud (OMS) define como Síndrome del Edificio Enfermo. Nos sentimos en confort en temperaturas comprendidas entre los 17º y los 27º, con valores de humedad relativa entre el 40% y el 60% y en ambientes ventilados.
- Existen numerosos efectos originados por la contaminación acústica que hacen especialmente relevante tener en cuenta el confort acústico en un proyecto. El ruido no solo es una molestia sonora, sino que afecta muy negativamente a la calidad del sueño y del descanso, disminuye la capacidad atencional, aumenta el estrés, el estado de alarma y la irritabilidad.
- Tenemos también en cuenta el confort olfativo. Evitaremos elementos y sustancias químicas o con altos niveles de COVs (Compuestos Orgánicos Volátiles) que perjudican nuestra salud a largo plazo. Este es un aspecto especialmente importante en nuestro proyecto.
- El entorno y las visuales tienen gran importancia en como percibimos un espacio que visitamos o habitamos. Vincular la vivienda al espacio exterior mediante ventanales que nos permitan mirar puntos lejanos sin obstáculos, favorece el descanso y evita la sensación de claustrofobia.
- Si tenemos en cuenta muchos de estos principios también contribuimos al último de los fundamentos: conseguir una sensación de seguridad. Diseñar un espacio en el que sentirnos seguros, en el que no sintamos miedo, ansiedad o claustrofobia es primordial para que todo lo demás funcione. Conseguirlo depende de la utilización de los demás factores de los que hemos hablado. Un buen uso de la luz natural, que no favorezca rincones estrechos y oscuros, un buen uso de los espacios, amplios y conectados con la naturaleza, de los colores…
Entendemos la neuroarquitectura como un conjunto de principios que se nutren unos de otros. Muchos de estos fundamentes funcionan por si solos, pero siempre conseguiremos un resultado realmente óptimo si jugamos con todos.
¿Cómo los hemos aplicado al Proyecto NICA?
La morfología de la planta de NICA nos ayuda a implementar muchos de los fundamentos de la neuroarquitectura. Se trata de 3 volúmenes interconectados entre si que favorecen completamente el contacto con el entorno exterior desde todos los puntos de la vivienda.

Así, la vivienda se ha implantado en una parcela con vistas a espacios verdes y sin la presencia de obstáculos que nos oculten la línea de horizonte. La luz natural es protagonista entrando por los muchos y grandes ventanales con los que cuenta la vivienda.

Las estancias son amplias y los techos altos, lo que favorece la sensación de confort, libertad y creatividad. El confort higrotérmico lo conseguimos gracias a su futura certificación como Passivhaus, y los estrictos estándares que debemos cumplir para construir una casa eficiente. Nos aseguramos una temperatura constante entre 20º y 21º durante todo el año. Además, los valores de humedad también se mantendrán en los estándares óptimos de confort, y mediante la instalación de un sistema de ventilación mecánica con recuperador de calor nos aseguramos aire limpio en toda la vivienda y ausencia de olores. La instalación de ventanas de gran calidad y de triple vidrio también son esenciales para conseguir confort térmico y acústico.

Como adelantábamos antes, el confort olfativo es uno de los puntos importantes en este proyecto debido a la sensibilidad química múltiple que padece Dominica. Hemos sido especialmente estrictos en este sentido, descartando todo material y producto que lleve componentes químicos, COVs o tenga composiciones que puedan afectar a su salud por mínima repercusión que pudiera tener. La casa NICA será un espacio verdaderamente libre de tóxicos.
Hemos diseñado en el estudio todo el mobiliario y elementos interiores de la vivienda. En este caso, a pesar de que se recomienda utilizar materiales de origen natural, hemos tenido que decantarnos por materiales metálicos que no incorporan barnices ni pinturas perjudiciales para Dominica.
La sensación de seguridad está más que conseguida en esta vivienda porque será una casa saludable para Dominica. Un lugar en el que por fin se sentirá cómoda y no verá incrementadas sus dolencias. Acostumbrada a vivir en ambientes que la perjudican, este proyecto será siempre un lugar seguro. Pues así ha sido concebido desde el principio.
Si quieres conocer el proyecto en profundidad y estar al día en todo los avances de la obra puedes seguirnos en nuestras Redes sociales y visitar el Blog de NICA.